18 mar 2011

Cuba: “De la chicha a la cerveza Plaza Vieja”

Por Marjoris Peregrín
Tomado de Habana Radio

Un sintético, ameno y sustancioso recorrido por el consumo y la producción de cerveza en Cuba, desde las primeras noticias de embarques llegados a La Habana, hasta la actualidad, nos ofrece el libro “De la chicha a la cerveza Plaza Vieja. Algunos apuntes sobre la producción y consumo de cerveza en Cuba”, de Rafael Fernández Moya, que fue presentado por Ediciones Boloña, en la galería de la biblioteca pública Rubén Martínez Villena del Centro Histórico de la capital cubana.

El especialista de la gerencia comercial de la compañía Habaguanex, quien ha publicado varios trabajos de investigación histórica relacionados con la cultura y el patrimonio cubanos, ofrece detalles de la elaboración de la chicha, bebida creada por los aborígenes a partir de la fermentación del maíz, y cómo la cerveza inglesa estuvo muy presente en el consumo de los cubanos desde el siglo XVIII, lo cual se evidencia en piezas arqueológicas, encontradas en excavaciones realizadas en la zona más antigua de la ciudad, que hoy se exhiben en la cervecería Taberna de la Muralla y en el Gabinete de Arqueología.

“De la chicha a la cerveza…” hace un recorrido por los sitios donde se expendía y podía consumir la cerveza, como el bar de un señor apellidado Mantecón, en San Rafael, entre Prado y Consulado; el Café Alemán en Prado y Neptuno, que era muy frecuentado por alemanes; el café Ambos Mundos, en la calle Obispo, que existió antes que el hotel, y según describe Emilio Roig de Leuchsenring, tenía una mesa reservada para comerciantes alemanes; así como algunos datos curiosos entre los que se destaca que, en un inicio, los cubanos encontraban esta bebida muy amarga y le añadían sirope para degustarla.

Hay en Cuba una tradición en el consumo y la elaboración de la cerveza, que competía con el vino catalán, y que las cervecerías cubanas siempre tuvieron técnicos alemanes, de ahí la calidad de las producciones nacionales reconocidas por las grandes fábricas como La Polar, y La Tropical, está última con premios conquistados en exposiciones industriales europeas. Este legado propició el surgimiento de una factoría con tecnología austriaca que elabora una exquisita cerveza en la Plaza Vieja.

El libro "propicia el análisis del patrimonio como exponente de encuentro intercultural, hibridación y mestizaje.